lunes, 6 de febrero de 2017

Diario del explorador

Hoy me he levantado muy nervioso y agitado. Casi no he pegado ojo en toda la noche... ¿La razón? ¡¡Nos vamos de excursión!! Es la primera vez en el curso que nos juntamos con todos los compañeros del resto de aulas y tengo tantas ganas de jugar juntos  y de verlos a todos que estoy súper emocionado.

Mis padres me han ayudado a preparar la mochila y tengo todo lo necesario: agua, almuerzo, comida y chubasquero. Me pongo mi chándal y mis deportivas y me pongo un poco de crema de sol. Ya estoy listo para ir a buscar al autobús. 

Cuando salgo a la calle me doy cuenta de que el día ha salido un poco ventoso y unas nubes oscuras amenazan en el horizonte. Es posible que pasemos frío pero no importa, ¡seguro que lo pasamos genial! 

Ya he llegado al peirón donde esperaremos al autobús. He sido el primero pero pronto veo aparecer al resto de mis compañeros. Todos traen una sonrisa en la cara y un poco de sueño en los ojos. Creo que no soy el único emocionado con la excursión. Nuestros maestros también están allí y traen la cara ilusionada. Aunque no nos lo digan, creo que ellos también tienen ganas de pasar el día juntos.

¡¡El autobús!! Ya llega cargado con nuestros amigos de las otras aulas. Rápidamente nos subimos a él. Tengo un poco de miedo de marearme, pero resulta que el conductor es mago y ningún niño se marea con él. Además nos pone la película de Monstruos S.A. ¡Estoy de suerte! Tenemos que ir ligeros porque aún hay que recoger a otras localidades. 

Ya hemos llegado a la primera parada del viaje: el centro de interpretación entre Tornos y Bello. Allí nos reciben varias monitoras y nos separan en dos grupos (por un lado infantil y primer ciclo y por otro, los mayores) y nos explican varias curiosidades de esta joya que tenemos aquí al lado y a la que prestamos tan poca atención. Nos cuentan entre otras cosas el viaje tan largo que hacen las grullas, dónde tienen sus nidos, cosas sobre la vida diaria de los animales de la laguna y la leyenda del gigante Endorro, gracias al cual tenemos esta laguna salada. 

Cuando terminamos allí, nos vamos otra vez al autobús y nos llevan al punto de inicio de nuestra ruta senderista. Los mayores salen desde las Cuerlas y los pequeños desde las piscinas de Gallocanta. El destino es el mismo: la ermita de la Virgen del Buen acuerdo, donde nos juntaremos todos. Durante el camino vienen con nosotros los monitores del centro de interpretación que nos van contando curiosidades de la laguna y de la flora y fauna que podemos encontrar. Es muy interesante, pero lo que más nos gusta es ir con nuestros compañeros a los que no solemos ver muy a menudo.




Los mayores han acabado antes de andar y cuando llegamos nos los encontramos mirando por el prismático. Hemos tenido que correr un poco porque ha empezado a chispear y teníamos miedo de que el viento se nos llevara a alguno porque realmente parecía un huracán. Felizmente, al final, hemos llegado todos. 





Después Carmina nos ha explicado la historia de la grulla Josefina, que es una grulla que viene todos los años a pasar el invierno aquí y que tiene al menos 15 años. Para identificarla lleva unas anillas en las patas que nos informan de que viene de Finlandia. Nos la han explicado con un peluche-grulla que es más grande que David. ¡Era realmente alta! 




Luego los monitores se despidieron y empezamos a comer.¡Qué rico el bocadillo que me he traído! Tengo hambre porque hemos andado bastante trozo, pero lo que más ganas tengo es de ponerme a jugar. Cuando termino, Sabi me da una galleta de chocolate, ¡está buenísima! Entonces nos dan un poco de tiempo libre: jugamos, reímos, cantamos, contamos chistes... ¡nos lo pasamos bomba! Se nos pasa el tiempo muy rápido pero pronto tenemos que ponernos en marcha. La siguiente parada es el museo de Gallocanta.





Ahora nos vamos todos juntos y los mayores ayudan a los pequeños a bajar y a luchar contra el viento, que es muy fuerte. Cuando llegamos al autobús, los más pequeños están agotados y cuando sus cabezas tocan el asiento se quedan dormidos. Es una lástima, porque tenemos que volver a bajar en sólo dos minutos.



Una vez en el museo nos recibe Javi, que es un gran experto en el mundo de la laguna y sabe mucho sobre las aves que habitan en este lugar.Pasamos dentro y nos encontramos con varias vitrinas donde hay un montón de aves disecadas. Javi nos pide que demos una vuelta y que elijamos nuestro preferido. Después nos sentamos en el suelo delante de cada vitrina y nos va explicando cosas sobre las aves que hemos elegido. También escuchamos cómo suenan sus trinos. Hay algunos muy bonitos.



Por último, subimos a la zona superior del museo donde podemos mirar con los prismáticos hacia la laguna. Tenemos suerte y podemos ver a un grupo de grullas que parece que posan para nosotros. 


Después de esto, ya tenemos que irnos. Nos despedimos de nuestros compañeros y nos volvemos a montar en el autobús hasta llegar a nuestra localidad. 



Cuando llego a casa me encuentro agotado, pero mis padres tienen preparada la merienda, así que me la como y muy emocionado les cuento cómo me ha ido hoy, lo que hemos hecho y lo que he aprendido. Después me voy a la ducha y me pongo el pijama. Una vez en la cama recapitulo todo lo que he hecho hoy. Definitivamente, ha sido un día estupendo.

¡Ah! ¡Y ya tenemos las fotos de la excursión! Si cliqueáis en la imagen podréis acceder al álbum.


2 comentarios:

  1. Fue super guay me lo pase super bien descubrí muchas cosas sobre las grullas y gallocanta lo que más me encantó fue jugar con mis amigos.Es nuestra primera excursión del segundo trimestre aprendí muchos sonidos de pájaros y porque las grullas tienen las patas muy largas, vimos la laguna con prismáticos y telescopio también vimos un vídeo de las grullas, también un tutor que me cayó muy bien me gustó mucho. (Óscar,Tornos)

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  2. Fue supe mega guay me lo pase genial sobretodo con mis amigos os hecho de menos de Andrea(Tornos)

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